domingo, octubre 29, 2006

Tributo a Red Auerbach


En la nochevieja del 98 al 99, en un alarde de amortización de barra libre, nos conjuramos para bebernos una copa por cada uno de los 16 anillos que tienen los Celtics. Por suerte para nuestro hígado nos quedamos en las 8 Copas de Europa del Madrid de baloncesto. Siete años después de aquella noche me hice una foto junto a la estatua del artífice de todos aquellos triunfos, el mismísimo Red Auerbach, que ayer pasó a mejor vida.

El mítico entrenador y presidente de los Celtics es historia del baloncesto, se trata de uno de esos personajes imprescindibles sin los que el deporte de la canasta no sería lo que es hoy en día. Sus 9 anillos como entrenador (8 de ellos consecutivos) sólo los ha conseguido igualar Phil Jackson y su leyenda seguirá viva mucho tiempo, tanto como los Celtics sigan jugando al baloncesto.

Auerbach pertenecía a esa clase de hombres moldeados por las grandes guerras, para los cuales cada partido era una batalla. En un tiempo en que los blancos predominaban en la cancha, el supo darle protagonismo a Bill Russell y a otros hombres de color, que cambiaron para siempre la forma de jugar al baloncesto.

Hay quién dice que la NBA está más devaluada que nunca, que ha perdido el Norte y cualquier mindundi europeo puede hacer fortuna por allí. El día que Larry Bird se retiró del baloncesto, con él se fue la suerte de la mejor franquicia de la historia. Estos últimos años no tienen que haber sido agradables para un ganador como Auerbach y como homenaje, este año los del Trébol le dedicaran la temporada completa al viejo Red, lo menos que merece es que consigan llegar a los Play-Offs.

Ha muerto uno de los Bostonianos más ilustres, un hombre a un puro pegado al que echaremos de menos y al que los turistas seguirán acercándose cada día para fotografiarse junto a él en su banquillo del Quincy Market. Gracias Red por todo lo que le regalaste al baloncesto y a los que amamos este deporte.

sábado, octubre 28, 2006

GranPelículaMuyRecomendable


Azuloscurocasinegro es una de esas 4 o 5 películas españolas que es obligatorio ver cada año. Se trata de una historia que nos resultará familiar, por la cercanía de los personajes y la sensación de que en un momento dado nosotros podríamos ser ellos.

El debutante Daniel Sanchez Arévalo se presenta como uno de los cineastas más prometedores de nuestro país, bajo el brazo trae una cinta que juega con el drama y a ratos te hace reír, sobre todo gracias al personaje que interpreta Raúl Arévalo: el Sean Penn español, un pedazo de actor que en unos años puede ser uno de los grandes, porque, a parte de su parecido físico con el genial actor americano, tiene hechuras de crack y no parece que se tome demasiado en serio a sí mismo.

Marta Etura interpreta a una diosa enjaulada, una de esas chicas que observas embobado cuando vas por la calle y cuyo único objetivo es sobrevivir y no olvidar nunca su pasado. Quim Gutierrez es el protagonista de la función, un pedazo de pan que representa la desorientación de los jóvenes de nuestra generación, víctima de su destino se consume amargado y encasillado en una portería, mientras vive sin saber que está enamorado de la mujer equivocada.

Espero que el día de la entrega de los Goya Azuloscurocasinegro se lleve unos cuantos, en caso contrario no pasa nada, es agradable ver que el cine patrio es capaz de darnos películas brillantes sin necesidad de grandes inversiones. Buenas historias y buenos actores, no hace falta mucho más.

jueves, octubre 26, 2006

Con mucho amor


Llamándose Jennifer Love Hewitt estaba llamada a convertirse en una reina del pastelón, pero como buena hija del 79, se resistió a someterse a un destino prefijado. Fue una de esas niñas actrices que empezaron haciendo anuncios. Su salto definitivo a la fama se produjo con la serie "5 en familia" y la película "Sé lo que hicisteis el último verano".

Cuentan que está algo acomplejada por sus generosos pechos, que no quiere que la gente sólo la recuerde por ellos, pero a la vez sabe explotar su dotadísima anatomía, que le permite pasar sin problemas de pechugona reina del grito a reencarnarse en la mismísima Audrey Hepburn.

Hace tiempo que la Hewitt se dio cuenta de que jamás ganaría un Oscar a la mejor actriz, y por ello decidió producir algunas de sus películas para poder interpretar los papeles que le apetecieran, al más puro estilo Stallone en Rocky. Ninguna de sus producciones pasará a la historia del cine, pero con ellas ha demostrado que es mucho más que una cara bonita: un cuerpo para el pecado y una mente para los negocios.

Como dato curioso, se quedó a las puertas de interpretar el papel de Claire Danes en "Romeo y Julieta", el director la descarto porque creía que no era lo suficiente moderna. Supongo que hay noches que ella misma se pregunta por qué apareció en "Garfield" y su secuela, acto seguido supongo que mirará el saldo de su cuenta bancaria y dormirá como un angelito.

Ahora podemos disfrutar - o sufrir - sus actuaciones en la serie "Entre Fantasmas", nada nuevo bajo el sol. Siempre será una actriz para alegrarse la vista, a la que jamás le faltará trabajo, al menos mientras se lo siga produciendo ella misma.

sábado, octubre 21, 2006

En tierras bávaras y cerveceras


Hofbräuhaus es probablemente la cervecería más famosa del mundo, cuando entras allí te sientes pequeño, por el tamaño del sitio y también por las enormes jarras de litro que todo el mundo consume. Aquello es como una sucursal perenne del Oktoberfest, en la que los bávaros y los turistas acuden a diario a disfrutar del zumo de cebada.

A parte de la cerveza, Munich tiene otros muchos alicientes, sin llegar al nivel de sofisticación que dicen tiene Berlín, el Mónaco de Baviera huele a modernidad y, a la vez, a profundo arraigo histórico. Desde dentro de la ciudad observas con claridad que tiene muchos motivos para sentirse orgullosa de lo que es hoy en día y también un vergonzoso pasado nazi que la urbe misma se niega a olvidar, por miedo a que la historia vuelva a repetirse.

El codillo, las salchichas y la deliciosa Weissbier (cerveza de trigo) no pueden faltar en la mesa de cualquiera que pare en Munich. Tal vez no tengan la mejor gastronomía del mundo, pero es innegable que los alemanes saben dar carisma a sus platos, la mayoría basados en la carne de cerdo y con unos postres de lo más espectaculares.

Lo que más impresiona a un madrileño que pase por allí es la paciencia de los conductores muniqueses. El claxon es un mero adorno en los BMWs, Mercedes, Volkswagen y demás bugas que pueblan la ciudad. Supongo que es otra forma de entender la vida, la sangre teutona es mucho más fría que la de los matadores latinos, y tal vez nosotros debiéramos tomarnos el tráfico con algo más de calma.

En torno a la parada de cercanías de Ostbahnhof se pueden encontrar varias decenas de garitos, el más famoso de ellos el Milchbar, del que no puedo decir gran cosa porque sus rubicundos puertas no nos dejaron entrar ninguno de los días en que lo intentamos. Sin haberlo pisado, estoy seguro de que he estado en sitios mejores.

Dónde si que conseguí entrar el viernes fue en el Kultfabrik, una enorme discoteca que llama la atención desde lejos por sus cañones de luz. Te cobran 5€ por entrar, a cambio de nada, y dentro las copas las ponen con dosificador, al menos no son de garrafa, como en la mayoría de los garitos de Madrid. La mejor opción es tomarse un Sambuca – sin quemarlo - y unas cuantas cervezas.

El sitio era grande y lo mejor que tenía era la música, por la ausencia de reggaeton, salsa o similares. Incluso había una zona en la que ponían rarezas pop/rock de los 80 y 90, como la genial “Narcotic” de los Liquido.

El sábado había mucha más gente y acabamos en un sitio poblado por europeos del Este, en el que un tipo sentado a la salida de los baños te obligaba a dejar alguna moneda después de hacer uso del escusado. Era algo que ya habíamos visto en unos cuantos restaurantes y que resulta patético en uno de los países más poderosos del planeta.

En resumen, Munich es una ciudad que merece la pena por todo lo que hay que ver allí y en sus alrededores, por su gente, su cerveza y su gastronomía. Respecto a su vida nocturna: cuando la pruebas entiendes porque a los alemanes les gusta tanto España.

domingo, octubre 15, 2006

Serenidad tranquila


La primera vez que la vi sonaba la canción "Dreams" de los Cranberries, era el primer capítulo de "Es mi vida", una de esas rarezas que el plus se permitía el lujo de emitir en abierto. La serie fue cancelada a los 19 capítulos, pero sus consecuencias eran inevitables: cualquier adolescente al que le gustarán las mujeres estaba condenado a enamorarse de aquella Angela Chase a la que interpretaba Claire Danes. En aquella época yo tenía 16 años y ella también.

Ha pasado ya más de una década y en ese tiempo se la ha visto en filmes de temática dispar: "Mujercitas", "Romeo + Juliet", "Legítima Defensa", "Los Miserables", "Giro al Infierno" o "Terminator 3". Estaba predestinada a pelear por el título de novia de América, pero al final se quedó a las puertas.

Claire Danes actúa para escapar de la soledad, revindicando su condición de atormentada hija de artistas criada en el Soho neoyorkino. Oliver Stone escribió su carta de recomendación para Yale, donde estudió un par de años de psicología sin llegar a acabar la carrera.

Ella sabe que es un rostro bonito y se aprovecha de su efecto sobre el otro sexo débil. En pantalla sabe vendernos su timidez impostada, sin que podamos dejar de sucumbir al imán de su sosería de postal. Es imposible escapar de esa mirada y al contemplar esos labios se te olvida hasta que una vez los besó Di Caprio.

Siempre será una mujer fronteriza entre dos décadas, que nació demasiado pronto para ser Natalie Portman y demasiado tarde para ser Julia Roberts. Pudo haber aparecido en “La lista de Schindler”, “Inocencia interrumpida”, “Lolita” o “Titanic”; pero como ella bien sabe, todo lo que planea le acaba saliendo mal. Da la sensación de que podía haber sido mucho más grande de lo que es, un diamante a medio explotar, con un rostro capaz de hacerte olvidar una mala semana.

Es un torrente de talento sin histrionismo, envuelto en una belleza serena. Una de esas chicas difíciles de entender que te reconcilian con el mundo a base de perennes sonrisas y que con un leve roce te insuflan el valor necesario para seguir remando contracorriente. Tal vez haya muchas actrices mejores, algunas más guapas y otras tantas más sensuales, pero pocas destilan esa falsa paz interior en escena como lo hace Claire Danes.

sábado, octubre 07, 2006

Gradualmente y luego de repente


"Prozac Nation" es una película rallante, con un buen puñado de actores de calidad que la hacen un poco más soportable. Vuelve al eterno mito del joven escritor atormentado por sus demonios. En este caso la protagonista es Christina Ricci.

La película está ambientada en Harvard, que, por una vez, deja de ser el paraíso de los empollones y se nos muestra como un lugar apto para las adicciones al sexo y las drogas. En el resto del elenco destacan Jason Biggs, Michelle Williams, Anne Heche y Jessica Lange. Los actores y la escena del desnudo pectoral de la protagonista son sin duda lo mejor de la película.

La moraleja final es que los Estados Unidos es el país del Prozac: 130 millones de recetas al año. La depresión está allí a la orden del día, es el reverso tenebroso de la sociedad del bienestar. Varias décadas sin guerras importantes han sembrado un virus psicológico que ataca gradualmente y luego de repente.

Es un buen ejemplo de cine independiente, en este tipo de películas la Ricci se siente como pez en el agua; ella que es una tía rara, encaja como pocas en el papel de enloquecida friki de la literatura. Uno de los momentos destacados de la cinta es el del concierto de Lou Reed, sin duda uno de los grandes.

jueves, octubre 05, 2006

Only one Keano

Hace unas meses se confirmó la retirada definitiva de Roy Keane, sin duda uno de los mejores futbolistas de los últimos quince años. La carrera del irlandés está marcada por luces y sombras, pero ante todo será siempre recordado como un ganador.

En una de esas noches, un buen amigo me comparó con Keane. La comparación venía al caso por la supuesta decadencia del Irlandés, después de haberlo dado todo tantas veces. Aquello al principio no me hizo mucha gracia, pero con el paso del tiempo me ha ido agradando más.

Como la mayoría sabéis soy un nostálgico del Manchester de los 90: Cantona, Schmeichel, Giggs y los Fergie Boys marcaron una época en el fútbol europeo. Sin llegar a los niveles de glamour de los galácticos, aquel equipo tenía algo que no se ha vuelto a ver hasta la fecha, una extraña mezcla de carácter y calidad que servía de puente entre el fútbol inglés de los 60 y el actual. Aquel equipo hizo olvidar de una vez las tragedias de Heisel y Hillsborough, sirviendo de trampolín a la flamante Premier League.

Durante trece temporadas Roy Keane fue el alma del United, la prolongación sobre el campo de Sir Alex Ferguson, el eterno capitán que cualquier equipo necesita para entrar en la historia.

El lado oscuro de Keane incluye lesiones intencionadas a otros jugadores, entradas al límite de la legalidad y rajadas varias. Keane nunca ha tenido pelos en la lengua y al final eso le costó su salida de la selección irlandesa y del Manchester. Pero es que un tipo con su carácter no podía seguir soportando formar parte de esa mediocre banda de niñatos en la que se ha convertido el que fuera mejor equipo inglés de los 90.

Después de que se fuera Cantona, Keane se convirtió en el líder indiscutible del equipo del triplete. En el 99, de la mano de Keane, conquistaron Liga, Copa y Copa de Europa. Keano no pudo estar por sanción en aquella mítica final del Camp Nou, pero esta claro que sin él jamás podrían haber llegado hasta allí.

Keane es además el mejor futbolista irlandés de la historia. Fue el jugador más destacado de su selección en el mundial del 94 y su empuje llevó en volandas a su equipo hasta la fase final del de Corea y Japón, dónde acabó saliendo por la puerta de atrás por desavenencias con su entrenador.

El pasado invierno se especuló con la posibilidad de que Keano se incorporara al Madrid como revulsivo. Por suerte su fichaje no llegó a concretarse y el irlandés acabó jugando en el Celtic de Glasgow, cumpliendo así con el sueño de cualquier católico de las islas y ayudando al equipo a ganar otro título liguero.

En estos tiempos inciertos en el que los españoles nos preguntamos una y otra vez por qué nuestra selección nunca gana nada en las grandes citas, tipos como Roy Keane nos recuerdan que a parte del físico y la calidad futbolística, para hacer grande un equipo hacen falta líderes ultracompetitivos, dispuestos a echarse el equipo a las espaldas y pegar cuatro voces cuando el divismo y la niñería de sus compañeros se hagan insoportables.

La leyenda del indomable Roy Keane seguirá viva mucho tiempo, tanto como en las gradas del Teatro de los Sueños se siga escuchando "There's only one Keano, only one Keano ..."

domingo, octubre 01, 2006

Pura sensualidad


Rosario Dawson también tuvo a bien nacer en el año 79. Su salvaje apariencia es fruto de un cóctel genético que incluye antepasados portorriqueños, cubanos, afro americanos, irlandeses y nativos americanos.

Fue descubierta en las aceras de su Nueva York natal, tenía 15 años y se convirtió en una de las protagonistas de la controvertida "Kids". Esta película refleja con maestría la sordidez de los barrios bajos neoyorquinos y sus efectos sobre unos adolescentes dejados de la mano de Dios. Bajo la suciedad reinante en la película, destacaba la sugerente belleza indomable de una joven Rosario.

”Kids” no supuso el comienzo de una fulgurante carrera, en el siguiente lustro solo participaría en seis películas de escasa repercusión, la mayoría de ellas ambientadas en su Nueva York natal, convirtiéndose en una de las actrices fetiche del polifacético Edward Burns.

Su consolidación definitiva se produjo con “La Última Noche”. En la mítica película de Spike Lee, interpretaba a la novia de un Edward Norton que apuraba las últimas horas antes de ser encerrado en la cárcel una larga temporada. En este filme, Rosario era capaz de interpretar a su personaje con cinco años menos, con la única ayuda de una falda de colegiala.

Después de ver esta película es difícil quitarse de la cabeza la ultra sensual imagen de la Dawson, que encarna como nadie a una de esas mujeres por cuyo recuerdo merece la pena sobrevivir entre rejas y, a la vez, podría volver loco a cualquiera pensando en lo qué puede estar haciendo mientras tú te consumes entre las cuatro paredes de tu celda.

En los útlimos tiempos se ha convertido en una de las actrices más solicitadas del momento gracias a sus intervenciones en “Alejandro Magno”, “Sin City” y “Clerks 2”. En todos sus papeles encarna a mujeres cargadas de sensualidad, más o menos explícita.

Bajo su espectacular apariencia se esconde una buena actriz que tarde o temprano será reconocida como tal; mientras ese momento llega, seguiremos disfrutando de su indómita presencia y todo lo que nos sugiere con solo verla moverse en pantalla.